El Maratón de Buenos Aires 2019/Banco Ciudad quedará en la historia por unos cuántos motivos. Por supuesto, el fervor de la multitud de participantes. El clima de fiesta. El nivel técnico superlativo (récords para el circuito de la “legión kenyata” con los 2h5m00s de Evans Chebet en hombres y las 2h25m46s de Rodah Jepkorir Tanui en damas). A la altura de los mejores del mundo. El Campeonato Sudamericano, sin dudas el mejor de la historia por nivel técnico y cantidad. Quedará, sin dudas, como el más grande maratón jamás realizado hasta hoy en territorio argentino. Y quedará, también, por la inolvidable performance de los mejores atletas argentinos,que dieron un notable salto de calidad: consiguieron marcas que –entre nuestros atletas- no se daban desde hacía más de dos décadas, desde que Antonio Silio (2h09m57s en hombres, 1995 Hamburgo) y Griselda González (2h30m32s en damas, 1997 Turín) establecieran registros que resultaron intocables.
A la cabeza de esta recuperación quedó el chubutense Joaquín Emanuel Arbe, ahora bajo la guía técnica de Jorge Basiricó. El múltiple y talentoso fondista de Esquel, que a lo largo de los últimos tiempos se prodigó en numerosas pruebas de pista y también en carreras de calle, reordenó su programación y se preparó especialmente en la altitud de Cachi. Esto dio sus resultados al coronar lo que parecía un sueño inalcanzable: la clasificación directa, por marca, para los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, siendo así el primer argentino que lo consigue.
Arbe venía de insinuar su gran momento de forma con su actuación en el 21k de Buenos Aires, pocas semanas antes (1h02m57s). Pero no tenía tanta experiencia en maratón. Sin embargo, se sintió siempre “en un ritmo perfecto” y concluyó en el 6° puesto de la clasificación general con 2h11m02s, sólo precedido por la legión de keniatas y el paraguayo Derlys Ayala. “Estoy muy feliz, se dieron todas las condiciones”, contó el atleta de Esquel, quien se llevó la medalla de plata del Sudamericano y el título nacional. Otro chubutense, Eulalio Muñoz –había debutado como maratonista con un promisorio resultado en Rotterdam en abril- también brilló con su 7° puesto en la general, el bronce sudamericano y el subcampeonato nacional: 2h12m21s su marca.
El único argentino del historial que ha corrido más rápido fue Silio, mientras que ninguno lo hizo como Arbe y Muñoz en territorio nacional. El bronce del Nacional y el 6° puesto del Sudamericano fue para otro maratonista que se afirma, Martín Méndez, con sus 2h16m44s.
Y también hay que destacar a otros argentinos que siguieron con notables progresos: el cordobés Pedro Luis Gómez (17° en la general, 4° del Nacional) con 2h19m13s y Antonio Jesús Poblete con sus 2h22m42s: el mendocino fue 20° en la general, 13° del Sudameriano y 5° del Nacional. También Lucas Báez (2h23m46s), Darío Ríos (2h25m20s), Gerardo Haro (2h25m44s) y José Félix Sánchez (2h25m56s) estuvieron por debajo de los 2h30. Y hay que retrotraerse a la década del 80 para recordar semejante producción colectiva de los maratonistas argentinos.
Así la prueba organizada por la Asociación Ñandú ha dado sus frutos en uno de sus objetivos centrales, y que es el repunte de los corredores de nuestro país, a pesar de todas las dificultades –principalmente económicas- que tienen para su preparación.
Si lo de los varones fue excelente, lo de las damas no se quedó atrás. Salvo el citado récord de Griselda, ninguna maratonista argentina había corrido tan rápido como Daiana Ocampo(2h34m12s) y Marcela Cristina Gómez (2h34m52s) lo hicieron ayer, y ninguna lo hizo así en circuitos nacionales. Ambas, además, concretaron el 1-2 en el Campeonato Sudamericano, seguidas por la brasileña Simone Ponte Ferraz. Lo de Ocampo terminó de confirmar su fulminante ascenso de los últimos tiempos, que incluyó el título sudamericano de 21k en Asunción, mientras Gómez –residente en Curitiba, Brasil- venía de ser la mejor argentina del 21k porteño. “Me siento muy feliz de correr en mi país, no hay otros circuitos como los de Buenos Aires, además de que se corre con un clima agradable”, expresó Gómez.
Otras dos maratonistas más experimentadas y ya con un amplio recorrido también integraron la formación nacional, con marcas dentro de su nivel actual: Mariela Ortiz (13ª. en la genreal y bronce del Nacional) con 2h46m13s y la olímpica Marita Peralta (15ª. en la general y 5ª. del Nacional con 2h47m52s). Entre ellas, la mendocina Olga Adela Barrios progresando hasta 2h47m49s.
Tal vez todos estos nombres también sirvan como inspiración a una futura generación de fondistas. Por su jerarquía técnica, su entrega y su esfuerzo.